https://doi.org/10.25058/20112742.434

Carles Feixa
feixa@geosoc.udl.es
Universidad de Lleida

Si la memoria no me falla, mi primer encuentro con Jorge Eliécer Martínez se produjo en un curso de doctorado que impartí hace unos años en Manizales, coincidiendo con la lectura de la tesis doctoral de Germán Muñoz. El entonces doctorando expresó su interés en los recorridos teóricos y conceptuales sobre la juventud, demostrando un notable conocimiento de las aportaciones de las teorías críticas, en particular de algunos pensadores franceses -como Foucault- e italianos -como Negri- que no acostumbran a citarse en los estados del arte canónicos sobre la juventud, por parecer sus aportaciones periféricas y no centrales en este campo. Recuerdo que me habló del libro Imperio, de Negri, que yo no conocía, y me pasó una copia digital que, confieso, todavía tengo entre mis lecturas pendientes, pese a que el tema del imperio de la juventud, como metáfora para comprender la implosión-explosión de los movimientos juveniles contemporáneos, y sus conquistas de territorios sociales, comerciales, etarios, simbólicos, cada vez más amplios, es uno de mis intereses actuales, como bien conocen los colegas del Grupo de Trabajo de CLACSO sobre las nuevas prácticas políticas de los jóvenes, del que Martínez Posada forma parte, y los amigos del doctorado de Manizales, en cuyo humus creativo su trabajo ha germinado y florecido.