https://doi.org/10.25058/20112742.n56.01

Wilmer Villa
Universidad Francisco José de Caldas, Colombia

Hace ya un tiempo 

Un día me encontré dando unos pasos, esto sería parte del caminar por este mundo, en el que empezaría a afrontar los encuentros con diferentes personas, así como las palabras sostenidas por el aliento de la emotividad, empleada para abrir los senderos de la memoria, las cuales me han llevado al terreno de los afectos. Esto sucedería con la existencia de Ernell Villa Amaya, quien en vida pasaría a cultivar los entrecruzamientos de los recuerdos, con lo que, llegaría a propiciar un existir en los abrazos, movilizados desde los tiempos, personas, contextos, experiencias y mediaciones del entrexistir en otras localizaciones. Hoy me ha tocado vivir el ausente-presente, sobre todo que él ya no está, pero los recuerdos lo ponen en una presencia que se hace posible por medio de la memoria.