DOI: https://doi.org/10.25058/20112742.217

Nahyr Remolina de Cleves
remocleves@hotmail.com
Universidad Colegio Mayor de Cundinamarca

Bertha Marlén Velásquez
bemar5@yahoo.es
Universidad Colegio Mayor de Cundinamarca

María Graciela Calle M.
marigracie@yahoo.es
Universidad Colegio Mayor de Cundinamarca

Resumen:

El presente artículo describe y reflexiona sobre el proceso histórico del quehacer pedagógico y los aspectos fundamentales del maestro como formador y cultor de vida, desde la antigüedad hasta los albores del siglo XXI. El maestro auténtico posee unas características esenciales que lo distinguen como líder, formador y forjador de personas, potenciador de saberes y valores que coadyuvan al desarrollo humano. No sólo enseña contenidos e instruye sino que educa con las actitudes y ejemplos de vida. Se presentan aquí las cualidades del maestro integral en que se conjugan el conocimiento científico, las virtudes intelectuales, el sentido humanista, la visión prospectiva, creadora y transformadora, la defensa de la verdad y de la vida, el cultivo de los valores éticos, la edificación innovadora de la cultura y el compromiso permanente de educar para la libertad.

Palabras claves: maestro, generador de conocimiento, potenciador de saberes y valores.